Sindicalistas de distintas fracciones reclamarán a Macri un bono de fin de año
El plenario de secretarios generales de las distintas fracciones que conviven en el sindicalismo aprobaron esta tarde el reclamo al Gobierno de un bono de fin de año en «compensación» por el deterioro del salario, además del pedido de «afianzar el modelo de sindicatos por actividad y la libre negociación colectiva».
En la sede de la CGT Azopardo, que conduce Hugo Moyano, se dieron cita además el jefe de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo», y sectores de los «Gordos» e «Independientes», quienes coincidieron en la «convocatoria al Consejo Nacional del Empleo y el Salario Mínimo» y el pedido para «asegurar el financiamiento del sistema de salud para los trabajadores».
En plenario fijó además para la primera quincena de enero una nueva reunión en Mar del Plata, en el marco del proceso de unidad sindical, de la que saldrá la fecha de un «congreso normalizador» del espectro gremial.
Documento
Dirigentes sindicales de 140 gremios se reunieron hoy para aprobar un documento en el que retomaron reivindicaciones que ya venían realizando al anterior gobierno nacional, describieron la situación económica como «estancada» y alertaron sobre el impacto inflacionario en los salarios.
La resolución final que se leyó luego de más de dos horas de plenario en el Salón Felipe Vallese del edificio de la CGT Azopardo reiteró reclamos que la Central conducida por Hugo Moyano venía realizando a la anterior administración nacional y agregó el llamado explícito a la unidad de los trabajadores.
La reunión fue convocada por la comisión de Unidad que viene trabajando por el acercamiento de las distintas centrales obreras pero estuvo dirigida de modo preponderante por Moyano y Luis Barrionuevo.
Respecto de la unidad de la central, el líder camionero aseguró que «en los momentos especiales» el movimiento obrero está unido y celebró la presencia de algunos dirigentes de otros sectores, como Carlos West Ocampo (Sanidad) o Sergio Palazzo (La Bancaria).
En su calidad de anfitrión, sostuvo que «todos los trabajadores están comprometidos en contribuir» porque «el país necesita salir del estancamiento en el que estaba».
Por otra parte, en la declaración oficial se solicitó el mantenimiento de las negociaciones colectivas «libres por rama de actividad» y el financiamiento de las obras sociales sindicales.
A la hora del análisis de la situación, tanto los discursos como lo enunciado como parte del consenso, apuntaron a «una economía inflacionaria y estancada» y señalaron que «el tipo de cambio, la revisión del cuadro tarifario, y la eliminación de las retenciones van a impactar en el nivel de precios afectando el poder adquisitivo de los salarios». «El nuevo presidente deberá vencer las resistencias internas y preparar condiciones que posibiliten un primer entendimiento», afirma también el documento emitido.
Con ese contexto, no faltaron expresiones críticas a la voracidad empresaria: «Los que tienen el dinero afuera y adentro, que hagan la vaquita, que refuercen el Banco Central, pero que la pongan los que más tienen», señaló Barrionuevo en su discurso.
Por su parte, Andrés Rodríguez (UPCN) dijo: «Todos intuimos hace meses que muchas de estas medidas había que tomarlas, pero queremos equilibrio para que el ajuste no recaiga sobre los trabajadores». Moyano cerró el plenario convocando a la próxima reunión de la comisión de unidad que se celebrará en Mar del Plata durante la segunda quincena de enero.